lunes, 7 de diciembre de 2015

Los enredos del diablo.

Los enredos del diablo.
Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas”(1 Timoteo 1:20). Así que existen cuestiones necias e insensatas que engendran contiendas, y existen profanas pláticas sobre cosas vanas.
Todas estas cosas causan una distracción, aún en la mente de los siervos del Señor, y Satanás astutamente los enreda en este tipo de cuestiones, y sutilmente los va apartando poco a poco de la línea central del propósito divino. Es por eso que debemos siempre atender al depósito inicial que ha sido entregado a la Iglesia de parte de Dios. Esta era la carga no sólo del apóstol Pablo; también el apóstol Juan tenía esta carga.
En su primera carta, en el capítulo 2:24: “Lo que habéis oído desde el principio, permanezca en vosotros. Si lo que habéis oído desde el principio permanece en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el
Padre”.
 Nos damos cuenta de que aquí el apóstol está hablando de algo que se ha escuchado en el principio; aquí se refiere  cuando vino el Señor Jesús y depositó su Espíritu y encargó en Sus apóstoles, en Su cuerpo, en la Iglesia.

Desde el comienzo de la Iglesia, se ha recibido un depósito; y eso es lo que el apóstol Juan llama también: “lo que habéis oído”; lo que, es algo específico, es algo definido; lo que habéis oído desde el principio permanezca en vosotros.
Note que lo que se ha oído en el principio tiene el efecto de colocarnos en el Hijo y en el Padre; por eso dice: “Si lo que habéis oído desde el principio permanece en vosotros, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre”. El propósito del mensaje cristiano, depositado en la Iglesia desde sus comienzos, es introducirnos en el Hijo de Dios, y por medio del Hijo de Dios, introducirnos también en el Padre.
En su segunda carta, Juan, en el capítulo 1.9 decía también:
Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo…”; aquí se refiere específicamente a la doctrina de Cristo; dice: “el que se desvía de la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo”.
La doctrina de Cristo es para que tengamos al Hijo, y al tener al Hijo, tengamos también al Padre.
Por lo tanto amados evitemos cuestiones necias y no nos dejemos enredar por las trampas del diablo, sigamos adelante cuidando el depósito y predicando el glorioso evangelio de nuestro amado Salvador.
Dios los bendiga.

Ps. José Piza N.

Cumpliendo el llamado.

Cumpliendo el llamado.

En la primera carta del apóstol Pablo a Timoteo 6:20: “Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, evitando las profanas pláticas sobre cosas vanas, y los argumentos de la falsamente llamada gnosis”. En este verso hay dos palabras claves: una es “guarda”, la otra es “evitando”; la carga del apóstol se remarca en estas dos palabras: guarda lo que se te ha encomendado, evitando las profanas pláticas sobre cosas vanas, y los argumentos de la falsamente llamado gnosis, o ciencia.
El apóstol está interesado en que los cristianos, especialmente aquellos obreros colaboradores como Timoteo, guarden lo que se ha encomendado.
Es muy fácil distraerse con ocurrencias múltiples, y disímiles, y apartarse de la línea central del propósito divino, de la intención de Dios, del ministerio del Nuevo Testamento. Por eso el apóstol le encarga:
guarda lo que se te ha encomendado”.
Hay algo específico que por Pablo le ha sido encomendado a Timoteo; es el ministerio que se recibió del Señor, del cual no hay que apartarse a diestra ni a siniestra. SI Dios lo ha llamado a enseñar, enseñe, si a predicar, predique, si a pastorear, pastoree, si a cantar, cante,  haga lo que Dios le ha encomendado. Esa era la preocupación del apóstol.
En su segunda carta le vuelve a decir a Timoteo en el capítulo dos, verso dos: “Lo que has oído de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para enseñar también a otros”. En este verso, como en el anterior, se ve lo que dice el apóstol: lo que has oído de mí; es un depósito específico que Pablo recibió en los comienzos de  su vida cristiana; es algo que debe conservarse, es algo en lo que se debe perseverar,  que debe transmitirse; es por eso que en la misma carta, en el capítulo uno, verso catorce, donde dice: “Guarda el buen depósito por el Espíritu Santo que mora en nosotros”.
Existe, pues, algo que se llama el buen depósito, algo que se encarga, algo que se ha recibido, algo específico, algo definido; no es una cosa nebulosa, no es algo de lo cual no se sabe bien qué es; no son improvisaciones; Dios se ha revelado, nos ha dado un mensaje definido; es el ministerio del Nuevo Pacto; y eso es lo que Pablo estuvo predicando, y eso es lo que Pablo está encomendando con mucho cuidado a Timoteo.
Todo obrero del Señor y todo siervo de Dios, necesita recibir esta carga que el apóstol Pablo estaba trasladando a Timoteo: el buen depósito de Dios.
 Mi amado hermano, usted ha recibido “el buen depósito”, es el llamado a servirle al Señor, hágalo con pasión no se desvíe a diestra ni a siniestra, manténgase en el propósito de Dios, cumpla su ministerio, hágalo con ánimo pronto, sea ferviente en las cosas del Espíritu, guarde el depósito de Dios en su vida.
Dios le dio la honra de servirle, llegue a la meta, cumpla el ministerio, guarde la fe y pelee la buena batalla.
Dios te bendiga.

Ps. José Piza N.

jueves, 3 de diciembre de 2015

Quien es un discípulo?

¿Quién es un discípulo?

Hemos visto que un discípulo es aquel que toma su cruz y viene en pos de Jesús, es decir, es alguien que muere a sí mismo, y vive para su maestro.
 El costo del llamado para seguir a Jesús es  alto, lamentablemente en el día de hoy con el afán de qué las personas vengan a Él, los estándares se han rebajado, se presenta un evangelio donde no hay necesidad de arrepentimiento, donde solo es necesario un cambio de opinión y nada más, aunque el estilo de vida de la persona siga siendo el mismo, se presenta un evangelio light, un evangelio sin compromiso.
 En sus discursos, Jesús estableció claramente las siguientes verdades:
1.      Nadie puede ser su discípulo, a menos que éste dispuesto a renunciar a todo, aún a su propia vida (Mr.8:34)
2.      Nadie irá al cielo, a menos que haga la voluntad de Dios (Mt.7:21).
3.      Nadie es su amigo, a menos que lo obedezca (Juan 15.14).
4.      Nadie es su hermano, a menos que haga la voluntad del Padre (Mateo 12:50).
Este costoso llamado era para las multitudes, pero también de manera especial, para sus discípulos.
 Amado, no suavicemos el ofrecimiento para seguir a Jesús. Recuerde que cuando El dijo esto muchos de sus discípulos ya no andaban con El. Jesús no está interesado tanto en la cantidad, sino en la calidad de sus seguidores.
Dios les bendiga.

Ps. José Piza N.

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Hacer discípulos.

Hacer discípulos: La gran tarea de la iglesia.

La palabra discípulos (Mathetes) aparece 261 veces en el Nuevo Testamento, mientras que la palabra griega para creyente (pistos) solo se encuentra 9 veces, y la palabra griega para cristianos (christianos) solo aparece en tres ocasiones, por lo tanto, el verdadero término para un hijo de Dios, es el de discípulo.
Los requisitos para ser discípulo.               
El primer requisito lo encontramos en el evangelio de Juan, capítulo 8, verso 32, Jesús dijo:”Si permanecéis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos, y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”.
 Según Jesús, los verdaderos discípulos son aquellos que permanecen o viven su Palabra, y en la medida qué aprenden su Palabra son liberados progresivamente.
El segundo requisito lo encontramos en Juan 15:8, Jesús dijo:”En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos”. Aquellos que no llevan fruto, no son llamados sus discípulos.
El tercer requisito lo  encontramos en Lucas 14:22:”El que no lleva su propia cruz y viene en pos de Mí, no puede ser mi discípulo”. Es interesante notar que grandes multitudes venían en pos de Jesús, pero El no estaba contento por eso, ni por los milagros que hacía, Jesús estaba buscando a personas que amaran a Dios por sobre todas las cosas, por esta causa es que El pone éste requisito “tomar la cruz”, todo el mundo sabía lo qué eso significaba, esa expresión era una sentencia de muerte, era lo que los romanos le decían a las personas que iban a ser crucificadas, más adelante en ese mismo día, Jesús dijo “Así, pues, que cualquiera de vosotros que no renuncie a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo”(Lucas 14:33).
Finalmente, ¿qué pasa si un creyente si un creyente no desea ser discípulo?, Jesús rsponde esta pregunta:”Por lo tanto, la sal es buena, pero si la sal pierde su sabor, no sirve para nada”(Lc.14:34-35). Lo que Jesús nos dice aquí se relaciona con lo anterior, un creyente que no se convierte en discípulo no sirve para nada.
Seamos discípulos y hagamos discípulos a todas las naciones es nuestra solemne responsabilidad.
Dios les bendiga.
Ps.José Piza.


martes, 1 de diciembre de 2015

La gran comisión.

Tema: La gran comisión.

Texto: Mateo: 28:19-20.
Introducción.- Para ser exitoso ante los ojos de Dios, es necesario entender la meta que Dios nos ha fijado a cada uno de nosotros sus siervos. Existen metas específicas y generales. Cada creyente tiene una meta específica, puede ser la de pastorear, cantar, orar, evangelizar, pero para cada creyente existe una meta general, esa meta es la de discipular.
Jesús quería que sus discípulos entendieran que su Padre le había otorgado la autoridad suprema, por lo tanto, El merece ser obedecido, es eso lo que nos dice cuándo indica que toda autoridad le ha sido dada en el cielo como en la tierra. La gran comisión qué  El nos encarga está basada en su plena y total autoridad.
El dice “por tanto”, o sea , debido a que he recibido toda autoridad, vayan y hagan discípulos. Esta es su gran visión para todos y cada uno de los ministerios. Nuestra responsabilidad es hacer discípulos.
El espera que vayamos y hagamos discípulos en todas las etnias de la tierra. Si no estamos ganando  almas y haciendo discípulos,  estamos fallando con relación al propósito de Dios para nuestras vidas y ministerios.
 No nos contentemos por cuántas personas llegan a nuestras iglesias, sino por cuántas hemos ganado y discipulado por medio de nuestro ministerio.



martes, 24 de noviembre de 2015

Una suma divina.


Tema: Una suma divina.
Texto: Salmo 119:160.
Aquí el salmista está declarando a la palabra del Señor como la verdad; pero es interesante que el utilice la expresión: “la suma de tu palabra es verdad”.
La palabra del Señor se compone de muchas verdades, pero no debemos aislar ninguna parte del resto de ella; necesitamos la suma de la palabra del Señor.
Es  interesante notar en el primer libro de Samuel, capítulo tres, versículo diez y nueve, algo que se dice acerca de Samuel; nos dice allí: “Y Samuel creció, y Yahveh estaba con él, y no dejó caer a tierra ninguna de sus palabras”. No dejar caer a tierra ninguna de las palabras del Señor, es algo que el Espíritu de Dios hace loable aquí en este pasaje. ¿Por qué? porque Satanás también usa las palabras de Dios, pero las aísla de su contexto, y las desvirtúa; como, por ejemplo, al Señor Jesús, Satanás tentó y le citó las Escrituras; sin embargo, el Señor Jesús tomó aquellas palabras de las Escrituras que estaba citando Satanás, y las relacionó a las demás palabras de Dios y a la verdadera intención de Dios. A lo largo de toda la palabra divina está la intención divina y el propósito divino; y cada porción de la palabra debemos relacionarla con su contexto y con la intención y el propósito de Dios.
Es por eso que el apóstol Pablo le escribía a
Timoteo, en su segunda carta, que en el capítulo dos, verso quince: “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de que avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad”. Otra traducción puede decir: que corta bien, o que traza bien, la palabra de verdad.
Es necesario, pues, tener en cuenta toda la palabra del Señor, la suma de Sus palabras; no dejar caer a tierra ninguna de Sus palabras; tomar el consejo de Dios completo, y trazar bien la palabra del Señor, identificando sus prioridades y la intención de Dios, sin aislarla del contexto.

En  segunda a los Corintios, decía el apóstol Pablo: “renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios”. No adulteremos la palabra de Dios, sino tomémosla en su suma y en su intención original.

martes, 15 de septiembre de 2015

La imposibilidad humana de la salvación.

La vanidad de la vida.

Tema: La vanidad de la vida.
Texto: Eclesiastés 1:2
Introducción: Salomón probó todo lo que el hombre desea probar, le dio rienda suelta a sus deseos, para finalmente decir que todo es vanidad,  no dijo que todo sea vano, sino que todo es vanidad, es decir, la vanidad es la esencia de todo, el habla de la vanidad cómo algo superlativo, todo es un gran engaño, todo lo tuvo en abundancia.
El ser humano busca la autorrealización, sentir bien, tener un sentido de dignidad y de aceptación de los demás y de sí mismo. A nadie le gusta sentirse fracasado.
En donde buscó Salomón su realización:
1.       En el éxito (1:1). El llegó a ser rey, el reinado no le dio la satisfacción en su alma, ¿cuántas personas que tienen éxito no terminan en el alcohol, las drogas y otros en el suicidio?
2.       En las riquezas. (2:8). Fue un hombre riquísimo, su reputación como hombre rico, infló su ego, la gente mide su importancia de acuerdo a la cantidad de bienes que tenga, hay personas que quieren aparentar que tienen mucho dinero pero están llenas de deudas.
3.       En el halago y el aplauso. (1:16)(2:9). Estaba rodeado de siervas y siervos, tenía el halago de muchas personas, hay personas que se alimentan con el halago de los demás, les encanta ser admirados, ostentan muchas cosas, un elogio nos eleva y una ofensa nos derriba, a las personas que les encanta el elogio una pequeña ofensa puede resentirlos y derribarlos, se sienten amenazados por otros que tienen mayores dones o talentos. algunos están tan hambrientos de adulación que pueden ser manipulados.
4.       En el poder. (2:4). Los dominios de Salomón aumento extraordinariamente, de los confines de la tierra venían a ver las riquezas de Salomón. Algunos gobiernan con base en el temor, inclusive padres usan el temor para controlar a sus hijos.
5.       En el amor (7:26-28). Pensó neciamente, pues al tener más mujeres tendría más afecto, todos deseamos ser amados, padres, madres, esposos, si sentimos que no somos amados nuestra autoestima queda por los suelos, pensamos que casándonos encontramos el verdadero propósito de la vida.
6.       En el conocimiento y la ciencia (1:13,18). Llegó a la conclusión que la sabiduría humana no sirve de mucho, los sociólogos y educadores nos dicen que la educación es la solucionan a los problemas, pero los países que más invierten en la educación son los que más problemas tienen con violencia, drogas y hogares disfuncionales. La educación humana no resuelve los problemas humanos, un  profesional no es menos pecador que un analfabeto, muchas sabios como Voltaire terminaron  locos, Darwin provocó una guerra,. La Biblia no está en contra de la verdadera ciencia.
7.       En el placer en sus múltiples formas (2:2,3). Tuvo a la mano todo lo que quiso, más esposas más dignidad. El sexo hace sentir bien por un momento, es un mundo de fantasía. Se rodeodó de bufones que lo hacían reír, el hombre se ríe de sus propio pecados, cuando están ebrios hablan cosas sin sentido, la risa de un necio es fantasiosa e irreal. Salomón llego a la conclusión de  que la vida sin Dios es una vida  sin sentido sin propósito.  De qué sirve tener éxito ante los hombres, si ante Dios somos fracasados, si tenemos dinero pero ante El somos deudores. La verdadera dignidad es conocer a Dios, servirle y amarle, vivir para la gloria de Dios, los que viven para sí mismos viven vacíos, con Dios valemos mucho, sin El no valemos nada. Si Dios no está contigo tu risa se convertirá en llanto, tus sueños en pesadillas
Ps.José Piza Nivela

El arca no funciona en medio de la desobediencia.

Tema: El arca no funciona en medio de la desobediencia.
Texto: 1 Samuel 4.
“ Y Samuel habló a todo Israel.  Por aquel tiempo salió Israel a encontrar en batalla a los filisteos,  y acampó junto a Eben- ezer,  y los filisteos acamparon en Afec. Y los filisteos presentaron la batalla a Israel;  y trabándose el combate,  Israel fue vencido delante de los filisteos,  los cuales hirieron en la batalla en el campo como a cuatro mil hombres. Cuando volvió el pueblo al campamento,  los ancianos de Israel dijeron:  ¿Por qué nos ha herido hoy Jehová delante de los filisteos?  Traigamos a nosotros de Silo el arca del pacto de Jehová,  para que viniendo entre nosotros nos salve de la mano de nuestros enemigos. Y envió el pueblo a Silo,  y trajeron de allá el arca del pacto de Jehová de los ejércitos,  que moraba entre los querubines;  y los dos hijos de Elí,  Ofni y Finees,  estaban allí con el arca del pacto de Dios. Aconteció que cuando el arca del pacto de Jehová llegó al campamento,  todo Israel gritó con tan gran júbilo que la tierra tembló. Cuando los filisteos oyeron la voz de júbilo,  dijeron:  ¿Qué voz de gran júbilo es esta en el campamento de los hebreos?  Y supieron que el arca de Jehová había sido traída al campamento. Y los filisteos tuvieron miedo,  porque decían:  Ha venido Dios al campamento.  Y dijeron:  ¡Ay de nosotros!  pues antes de ahora no fue así. ¡Ay de nosotros!  ¿Quién nos librará de la mano de estos dioses poderosos?  Estos son los dioses que hirieron a Egipto con toda plaga en el desierto.  Esforzaos,  oh filisteos,  y sed hombres,  para que no sirváis a los hebreos,  como ellos os han servido a vosotros;  sed hombres,  y pelead. Pelearon,  pues,  los filisteos,  e Israel fue vencido,  y huyeron cada cual a sus tiendas;  y fue hecha muy grande mortandad,  pues cayeron de Israel treinta mil hombres de a pie.
Introducción.- Una vez más el pueblo de Israel está en guerra contra uno de su más feroz enemigo, los filisteos, realmente los filisteos eran como una piedra en el zapato que evitaban la tranquilidad del pueblo de Dios.
Al ver a su enemigo presentándole la batalla, el pueblo de Israel decide traer el arca, símbolo de la presencia de Dios, para que Dios les de la victoria. Pero, lamentablemente para ellos, de poco o nada , les sirvió tener el arca de su lado , pues el pueblo de Israel fue vencido delante de los filisteos.
 Extraigamos algunas verdades espirituales de ésta historia:
1.      Las Escrituras nos enseñas que se había trabado el combate. Permítame decirle, que no solamente el combate se había trabado, sino que toda la vida espiritual de Israel estaba trabada, pues se habían dedicado a hacer lo malo antes los ojos de Jehová. Las Escrituras enseñan que cuando desobedecemos al Señor, El envía  su ángel,  para que estorbe nuestro camino(Sal.35:6)
2.      Ellos traen el arca para que se destrabe la batalla. Ellos trajeron el arca para que la presencia de Dios destrabe ésta batalla, la Biblia dice que la batalla no se destrabó, sino más bien, la batalla se perdió. No funciona, amado hermano, llevar la presencia de Dios al campo de batalla, cuando nuestra vida no está alineada con los preceptos de Dios.
3.      La presencia de Dios no funciona en un ambiente de perversidad ni mucho menos de guerra. El lugar de habitación del arca era un ambiente de paz y de santidad, más los que vivían alrededor de ella estaban llenos de pecado y maldad. De nada sirve que oremos por nuestro matrimonio o que pidamos oración para que Dios lo restaure, si no estamos dispuestos a ceder, de nada sirve que pidamos oración para ser libres del alcoholismo, sino estamos dispuestos a renunciar a éste vicio, podemos irnos a retiros, podemos pasar las 24 horas del día encerrados en la iglesia y asistir los 365 días del año, pero si no nos alejamos de nuestros malos caminos, nuestra vida seguirá siendo igual.
4.      Antes que llegue el arca habían muerto 4000, cuando ésta llegó, murieron 30000. A veces llevamos a las personas a la iglesia para que éstas cambien, pero el asistir a la iglesia no cambia a nadie, cargar la Biblia bajo el brazo no produce ningún efecto.
5.      La presencia de Dios no es para solucionar problemas. Dios no vino para solucionar problemas, El vino para ser nuestro Señor, cuando El sea el Señor de nuestras vidas, El se encargará de nuestros problemas. Recordemos que la presencia no es para que nos sintamos bien, si no que soy yo el que debo de hacer sentir bien a Dios, pues mi propósito debe de ser de agradarle.
6.      El pueblo de Israel gritó, gritó no por Dios, sino por los beneficios qué podían obtener por causa de Dios. Israel se esforzó en traer el arca, en gritar, tuvieron gran entusiasmo, hubo fervor, pero no había relación con el Dios del arca. En muchas ocasiones buscamos a Dios, no por lo que El es, sino por lo que podemos obtener de Él.
7.      Dios no pelea lo que yo organizo. Dios pelea lo que El organiza.
8.      Finalmente, el pecado no se soluciona trayendo el arca o la presencia de Dios, el pecado se soluciona con arrepentimiento.
Dios lo bendiga.
Lcdo. José Piza Nivela.









sábado, 12 de septiembre de 2015

Tema: La imposibilidad humana de la salvación.
Texto: Mr.10:17-27.
“Al salir él para seguir su camino,  vino uno corriendo,  e hincando la rodilla delante de él,  le preguntó: Maestro bueno,  ¿qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno?  Ninguno hay bueno,  sino sólo uno,  Dios. Los mandamientos sabes: No adulteres.  No mates.  No hurtes.  No digas falso testimonio.  No defraudes.  Honra a tu padre y a tu madre.  El entonces,  respondiendo,  le dijo: Maestro,  todo esto lo he guardado desde mi juventud. Entonces Jesús,  mirándole,  le amó,  y le dijo:  Una cosa te falta:  anda,  vende todo lo que tienes,  y dalo a los pobres,  y tendrás tesoro en el cielo;  y ven,  sígueme,  tomando tu cruz.  Pero él,  afligido por esta palabra,  se fue triste,  porque tenía muchas posesiones. Entonces Jesús,  mirando alrededor,  dijo a sus discípulos:  ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! Los discípulos se asombraron de sus palabras;  pero Jesús,  respondiendo,  volvió a decirles: Hijos,  ¡cuán difícil les es entrar en el reino de Dios,  a los que confían en las riquezas! Más fácil es pasar un camello por el ojo de una aguja,  que entrar un rico en el reino de Dios. Ellos se asombraban aun más,  diciendo entre sí: ¿Quién,  pues,  podrá ser salvo? Entonces Jesús,  mirándolos,  dijo:” Para los hombres es imposible,  mas para Dios,  no;  porque todas las cosas son posibles para Dios”
Introducción._ Los judíos creían que la salvación se obtenía por medio de la observancia de la ley, los discípulos de Cristo, de igual forma pensaban que la salvación se conseguía por medio de las obras. En el día de hoy, las personas al igual que la iglesia creen que obtener la salvación es algo fácil, algunos piensan que con ir a la iglesia, hacer una sencilla oración y poner en práctica los mandamientos nos aseguran ser salvos. En las Escrituras hay más de 100 textos que nos dicen que la salvación es única y exclusivamente por la gracia de Dios.
Veamos lo que nuestro pasaje nos enseña:
I.                        Éste joven pensaba que Jesús enseñaba preceptos morales. Lo llama “maestro bueno”, él creía que Jesús era un maestro sensacional, el había clasificados a las personas en dos grupos, los buenos y los malos, ese era su forma de ver a las personas y también a los maestros.
II.                        El ignora la divinidad de Cristo. Lo considera un buen maestro, al igual que muchos judíos  catalogaban a sus rabinos, para éste joven, Jesús es uno más de esa lista. Desconoce completamente la divinidad de Jesús.
III.                        Ignora la naturaleza del hombre. El clasifica a los hombres entre buenos y malos, los que obedecían la ley eran buenos y los que la desobedecían eran malos. En su carta a los Romanos  3 :10, Pablo dice:”No hay justo, ni aún uno”
IV.                        La pregunta que hace es completamente errada.”¿qué cosa haré para heredar la vida eterna?. El creía si se hacían ciertas cosas se podía obtener la vida eterna.
V.                        Miente al decir que ha guardado todos los mandamientos. Pues el primero dice:”Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas”. El amaba más las riquezas qué a Dios.
VI.                        El desconocía que sí se desobedecía unos, se desobedecían todos. Jesús conocía la codicia del joven, no guardaba ninguno de los mandamientos, el pedirle que venda sus posesiones era un llamado al arrepentimiento.
VII.                        La salvación es algo que el hombre no puede conseguir por sus propios medios. En el verso 27, se nos dice, que para los hombres es imposible, si no es por la gracia de Dios, ningún ser humano puede ser salvo.

 Ps.José Piza Nivela.

martes, 14 de julio de 2015

El valle de los huesos secos

Dios es mi escudo

La fe de la mujer sirofenicia

La fe de la mujer con flujo de sangre

Jabes, del dolor a la abundancia

Mujeres en la Biblia 1.

Jefté, una vida sin propósito

Eutico, el que se durmió en un culto

martes, 30 de junio de 2015

Añadir leyenda
Ahitofel, el hermano de lo necio.
En el Segundo libro de Samuel, capítulo 16:23 encontramos lo siguiente:” Y el consejo que daba Ahitofel en aquellos días era como si se consultase la misma palabra de Dios. Así era el consejo de Ahitofel, tanto en los días de David como de Salomón.
Al leer este pasaje nos podemos dar cuenta que Ahitofel era un hombre de Dios, con un ministerio extraordinario, su don era el de la consejería, también podemos inferir que tenía un espíritu de revelación. El ministerio de Ahitofel es único en la Biblia, de ninguna persona se nos dice que tenía el ministerio de la consejería, y que consultarlo a él, era como consultar la misma palabra de Dios, por lo tanto, decimos que el Espíritu Santo estaba en éste hombre.
Pero por que leemos en  2 Samuel 17:23  que al no seguirse  su consejo,  AHITOFEL,  enalbardó su asno, y se levantó y se fue a su casa a su ciudad; y después de poner su casa en orden, se ahorcó, y así murió, y fue sepultado en el sepulcro de su padre.
¿Cómo es posible qué un hombre de Dios como él se matará porque no se había seguido su consejo?
En  Segunda de Samuel 11:3 encontramos que Eliam tuvo una hija, la cual se llama Betsabé y en Segunda de Samuel 23:34 encontramos que Eliam era hijo de Ahitofel, por lo tanto, Betsabé era nieta de Ahitofel.
Entonces nos damos cuenta el porqué Ahitofel al no seguirse su consejo se suicida, él tenía odio contra David a causa de la afrenta que le hizo a su nieta.
Ahitofel esperó 11 años para vengarse  de David, tuvo odio en su corazón durante todo ese tiempo.
 Podemos ver en este hombre:
·         Doble vida. En público era una cosa, en privado otra.
·         Perdida de principios. Después de ser un buen consejero, ahora es un traidor y se ha pasado al lado del mal.
·         En su corazón se anidó el resentimiento y el deseo de venganza.
Las consecuencias de su resentimiento fueron:
·         El juicio de Dios
·          Muerte.
·         La cura del resentimiento.
·         Arrepentimiento
·          Confesión.

·         Perdón
L Lcdo. José Piza

miércoles, 17 de junio de 2015

La gran comisión.
 Mateo 28:18-20.
 Muchos han creído que éste mandamiento era solo para los discípulos, pero creemos que este mandamiento es para nosotros hoy. La palabra Toda! Aparece 4 veces en estos versículos.
Guillermo Carey era un simple zapatero, pero un día sintió la necesidad de ser misionero, pues creyó que  si la responsabilidad de todo hombre era creer en el evangelio, era también responsabilidad de todo aquel que conoce el evangelio  esforzarse en darlo a conocer.
Éste mandamiento produce 4 cosas en nosotros:
·          Nos pone bajo la autoridad de Cristo. Hay una conexión entre el mandato de Cristo y su autoridad. El Padre envió a su Hijo como un misionero, así también Él nos envía. Hay muchos motivos para predicar el evangelio, el amor a los perdidos, pero lo más importante es que estamos bajo la autoridad de Cristo, por eso Pablo dijo “ay de mí sino predico el evangelio”. El estar bajo la autoridad de Cristo también nos confiere esa autoridad, por eso es que podemos hablar con confianza de su muerte y resurrección, esto no es una opción, es un mandato. El nos brinda su autoridad.
·         Este mandato es expansivo, es a todas las naciones, la ley no decía id a todas las naciones. La iglesia primitiva no deseaba ir a todas las naciones, no fue fácil para ellos por sus prejuicios. Hacer discípulos es ganar la mente y el corazón de las personas para Cristo, es ganarlos para Cristo, es formar a Cristo en ellos.
·         Nos prescribe el método para hacer discípulos. Nos dice “bautizándolos en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo enseñándoles todas las cosas”, bautismo y enseñanza, es fácil, solo requiere obediencia y dedicación, el método es simple, esto no requiere que estemos ansiosos, no se necesitan métodos ingeniosos, no se debe de ser más amenos, mas casuales. El método es sencillo, implica iglesias locales, discipular es algo ligado a una iglesia local, solo la iglesia tiene la autoridad de enseñar y bautizar,  iglesia local hay miembros  comprometidos y ministros comprometidos con la autoridad bíblica, esto implica miembros ordenados, disciplinados y sometidos, las iglesias no son clubs, no son plataformas para promoción, no son  centros de terapias, es la casa del Dios vivo, columna y baluarte de la verdad, se pueden hacer discípulos sin iglesia? Se puede bautizar sin iglesia? Hay muchos medios de gracias pero estos funcionan por medio de la iglesia, la vida espiritual está ligada a la iglesia.la prosperidad espiritual ésta ligada a la iglesia. David demandó a Jehová una sola cosa, estar en su casa. Agustín dijo nadie puede tener a Dios como padre sino tiene a la iglesia como madre, y Lutero expresó: fuera de la iglesia es imposible tener salvación”, Spurgeon dijo:”no existen cristianos ambulatorios”. No hay necesidad de modelar el método de Dios, debemos utilizarlos como es, no usemos estrategias carnales.

·         Nos promete su Presencia. Cada vez que Dios hizo un pacto, prometió su presencia.(Gn.17:17)(Lv.16:16). En vista de esta gloriosa promesa, salgamos confiados a realizar ésta maravillosa obra.
Lcdo. José Piza Nivela.

viernes, 5 de junio de 2015

Fuego en el altar
 Cuando Dios sacó al pueblo de Israel de la tierra de Egipto fue muy claro al decirles que si ellos obedecieran atentamente a sus preceptos, El  los construiría en un reino de sacerdotes:” Ahora pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi [especial] tesoro sobre todos los pueblos; porque mía [es] toda la tierra. Y vosotros seréis mi reino de sacerdotes, y gente santa.(Ex.19:5-6).
 El Apóstol Pedro en su primera epístola nos dice:” vosotros también,  como piedras vivas,  sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo,  para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo”. (1Pe.2:5) Por lo tanto, las Escrituras identifican a cada creyente como un sacerdote.
En Levítico 6, desde el verso 8 al 13, encontramos lo siguiente:” Habló aún Jehová a Moisés,  diciendo:” Manda a Aarón y a sus hijos,  y diles: Esta es la ley del holocausto:  el holocausto estará sobre el fuego encendido sobre el altar toda la noche,  hasta la mañana;  el fuego del altar arderá en él. Y el sacerdote se pondrá su vestidura de lino,  y vestirá calzoncillos de lino sobre su cuerpo;  y cuando el fuego hubiere consumido el holocausto,  apartará él las cenizas de sobre el altar,  y las pondrá junto al altar.  Después se quitará sus vestiduras y se pondrá otras ropas,  y sacará las cenizas fuera del campamento a un lugar limpio. Y el fuego encendido sobre el altar no se apagará,  sino que el sacerdote pondrá en él leña cada mañana,  y acomodará el holocausto sobre él,  y quemará sobre él las grosuras de los sacrificios de paz. El fuego arderá continuamente en el altar;  no se apagará”.
 Las Escrituras nos enseñan por medio de éste pasaje, una de las muchas obligaciones de los sacerdotes. Dios les había indicado claramente, que el fuego en el altar nunca debía de apagarse, éste debía arder constantemente, por lo tanto, decimos, que la suprema obligación de los sacerdotes era hacer que ese fuego se mantuviera ardiendo.
Al analizar la responsabilidad de los sacerdotes, podemos inferir  las siguientes verdades:
1.      Ésta responsabilidad era intransferible.- Es decir, ellos no la podían delegar a terceras personas. Dios había sido claro, la responsabilidad era exclusivamente de ellos. Si ´el fuego se hubiera apagado, ellos no podían ni debían de culpar a otros, pues repito, la responsabilidad era solo de los sacerdotes.
2.      Ellos debían de ser diligentes en cuidado de ese fuego, que según las Escrituras había descendido del cielo de Dios.
3.      Ellos debían de proveer la leña para mantenerlo vivo, es decir, debían de ir al campo y recoger la provisión suficiente para mantenerla encendida.
4.      Debían de retirar la ceniza diariamente, so lo encontramos en el verso 10. La ceniza en el altar sería un grave obstáculo para que el fuego se mantuviera encendido. Ésta responsabilidad también era diaria, pues hubiese sido funesto haberla dejado acumular y retirarla semanal o mensualmente.
Estas responsabilidades de los sacerdotes tienen aplicaciones espirituales para nuestras vidas:
1.      Nosotros como sacerdotes del Señor tenemos también la enorme responsabilidad de mantener el fuego de Dios encendido en nuestro altar espiritual. La responsabilidad es absolutamente nuestra. Ésta responsabilidad no la podemos transferir a terceras personas, ni mucho menos, podemos culpar a otros de nuestra situación espiritual. La responsabilidad es nuestra, no de nuestros líderes, pastores, esposas, esposos, tanto usted como yo, tenemos ésta solemne responsabilidad de velar porque el fuego de Dios no se apague en nosotros.
2.      Para  mantener éste fuego encendido, debemos de ser diligentes en los asuntos espirituales, diligentes en la oración, en el estudio diario de la Palabra de Dios, en asistir a la congregación, el Apóstol Pablo nos dice que en lo que requiere diligencia debemos de ser fervientes en el Espíritu.
3.      Debemos de meterle leña a nuestro altar. Cada vez que nos dedicamos a leer las Escrituras, a escuchar una predicación o escuchamos alabanzas, estamos motivándonos para mantener el fuego encendido en nuestras vidas. Las Escrituras nos dicen que debemos de motivarnos a nosotros mismo, en una ocasión, David estaba desmotivado, pero el habla con su alma y le dice en el Salmo 103:” Bendice,  alma mía,  a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice,  alma mía,  a Jehová,  Y no olvides ninguno de sus beneficios. Él es quien perdona todas tus iniquidades,  El que sana todas tus dolencias; Él que rescata del hoyo tu vida,  El que te corona de favores y misericordias; Él que sacia de bien tu boca  De modo que te rejuvenezcas como el águila”.
Finalmente, Pablo le dice a Timoteo “Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos”(2Tim.1:6). Esta responsabilidad es nuestra, nosotros somos los llamados a avivar el fuego de Dios en nosotros.
Lcdo. José Piza Nivela-

miércoles, 3 de junio de 2015


Tema: La gloriosa elección.
Texto: "Pero nosotros debemos dar siempre gracias a Dios respecto a vosotros, hermanos amados por el Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salvación, mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad, a lo cual os llamó mediante nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo." 2 Tesalonicenses 2: 13, 14.
En las Sagradas Escrituras encontramos varias expresiones para identificar a los creyentes. Una de las más abundantes y significativas es la de” elegidos”, por lo tanto, si hay elegidos, es porque hay elección. Veamos algunos textos. En Mr.13:20 en adelante, Jesús dice;” "Y si el Señor no hubiese acortado aquellos días, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos que él escogió, acortó aquellos días." "Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas, y harán señales y prodigios, para engañar, si fuese posible, aun a los escogidos." "Y entonces enviará sus ángeles, y juntará a sus escogidos de los cuatro vientos, desde el extremo de la tierra hasta el extremo del cielo”. En  Lucas 18:7”  "¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a él día y noche? ¿Se tardará en responderles?”
A través de las epístolas, los santos son constantemente llamados "los elegidos." En su carta a los Colosenses, Pablo dice: "Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia." Cuando le escribe a Tito, se llama a sí mismo: "Pablo, siervo de Dios y apóstol de Jesucristo, conforme a la fe de los escogidos." Pedro dice: "Elegidos según la presciencia de Dios Padre." Y si vamos a Juan, encontraremos que le gusta mucho esa palabra. Dice: "El anciano a la señora elegida;" y habla de: "tu hermana, la elegida." Y sabemos dónde está escrito: "La iglesia que está en Babilonia, elegida juntamente con vosotros." Ellos no se avergonzaban de esa palabra en aquellos días; no tenían miedo de hablar de ella. 
En Juan 15:16, el Señor Jesús nos dice que no lo elegimos nosotros a Él, sino que El nos eligió a nosotros, En  1 Corintios 1: 26-29: "Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia. En Romanos 11:7: "¿Qué pues? Lo que buscaba Israel, no lo ha alcanzado; pero los escogidos sí lo han alcanzado, y los demás fueron endurecidos," y en el versículo 5 del mismo capítulo, leemos: "Así también aun en este tiempo ha quedado un remanente escogido por gracia. Leemos en Hechos 13: 48: "Los gentiles, oyendo esto, se regocijaban y glorificaban la palabra del Señor, y creyeron todos los que estaban ordenados para vida eterna.
 Luego de haber citado varios textos, saquemos algunas verdades de ellos:
1.      En primer lugar, la elección de que hemos sido objeto es Eterna. Es decir, se realizó en la eternidad pasada.
2.      En segundo lugar, es completa. No depende de ningún mérito nuestro. No depende de nuestras obras, ni de nuestra espiritualidad, ni de nuestra fe.
3.      En tercer lugar, es personal. No es una elección colectiva, sino individual.
4.      En cuarto lugar, es una elección que tiene gloriosos objetivos. La elección de Dios es una elección para santificación y para fe. Dios elige a Su pueblo para que sea santo, y para que sea un pueblo de creyentes. La elección de Dios no es para que vivamos una vida de orgullo espiritual, como lo hicieron en otro tiempo los fariseos, sino mas bien humillémonos y seamos agradecidos, viviendo una vida de rectitud y santidad hacia nuestro Dios. Gracias a El por su llamamiento santo.
Lcdo. José Piza Nivela.