domingo, 4 de junio de 2017

Daniel y su estilo de vida.


En las páginas de las Sagradas Escrituras encontramos historias impresionantes, sin duda alguna, una de ellas es la de éste muchacho hebreo, quien  probablemente a los 18 años de vida, fue llevado cautivo a Babilonia. Durante su cautiverio, las virtudes de éste chico brillaron intensamente. Veamos algunas de sus virtudes:

·        Lealtad . La vida de Daniel, desde principio a fin, mostró su firme convicción de ser fiel a Dios, independientemente de lo qué esto pudiera significarle.
·        FirmezaDaniel propuso en su corazón, es decir, él  obró por medio de la emoción, sino que su accionar fue producto  de una decisión perseverante, continuada y cultivada constantemente. No fue como la piedad de Israel en los días del profeta Oseas, parecida al rocío de la mañana. Uno de nuestros más graves defectos es la inconstancia.  La incapacidad de perseverar, cuántos propósitos fallidos, empresas empezadas y jamás terminadas,  demasiadas decisiones tomadas y luego olvidadas, sin numero de promesas incumplidas,.
·        Resistencia al mal.  Aunque estaba lejos de su país, sin sus profetas y sacerdotes, ellos decidieron ser fieles. En Babilonia no había templo ni sinagogas, ni levitas ni rabinos, pero ellos decidieron mantener su identidad espiritual.
·        Humildad, Daniel ni sus compañeros jamás hicieron alarde de su fe ni de su espiritualidad, ni de sus dones ni talentos, nunca fue un exhibicionista. Al ver su vida notamos su amabilidad, sencillez, cortesía, tacto, la forma sabia como trató a los demás, siempre fue respetuoso con las autoridades, como lo enseña el apóstol Pablo en Ro. 13:9-10.
Miremos éste hermoso ejemplo y mostremos ésta misma aptitud en medio de una generación adúltera y pecadora que no conoce a Dios

No hay comentarios:

Publicar un comentario